La reina Marie Marie Christine decidió transformar este sitio en un jardín al estilo inglés del siglo 28, siguiendo el concepto romántico de la naturaleza.

Campo del Moro

Los terrenos del Campo del Moro no se convirtieron en un jardín porque era imposible conectarlos con el Palacio Real, que estaba situado mucho más arriba.

Esta posición dominante nos ha permitido crear una de las mejores vistas de Madrid, la del Palacio Real, detrás de una gran alfombra verde salpicada de fuentes monumentales en un amplio y sombreado jardín romántico. Los jardines tienen dos fuentes neoclásicas: las de los Tritones y las del Palais de Coquillages.

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